3.1 Debate.

¿Escuela inclusiva?

En primer lugar, decir que los dos textos mencionados en la actividad son muy interesantes, debido a que especifican muy bien cuál ha sido la progresión que ha sufrido la escuela para los TEA y otros alumnos con alguna dificultad. Se ha pasado de un análisis clínico y de investigación, donde lo único que preocupaba era el diagnóstico y la "curación" de estos alumnos a buscar la autodeterminación de los TEA, partiendo de sus habilidades y conocimientos e integrarlos en la vida cotidiana.

Creo que sí que es posible una escuela inclusiva, y que vamos en la dirección correcta para conseguirlo, pero los avances son muy lentos, ya que se necesita un cambio de mentalidad de la sociedad en la que vivimos y unos mayores recursos de los que disponemos, tanto digitales como económicos. Hoy en día, bajo mi punto de vista, la escuela inclusiva, en la mayoría de los casos, es matricular a los alumnos en los centros ordinarios, donde se ajustan el currículum de éstos alumnos y poco más, sin tener en cuenta los aspectos sociales, que tan importantes son, ya que los contenidos deberían estar ligados a la vida cotidiana de dichos alumnos. Una de las afirmaciones que más me ha llamado la atención es la que realiza la FEAPS que dice lo siguiente: "centros ocupados por personas y no por sus patologías".

Por este motivo pienso que en los centros tienen que trabajar personas que estén formadas para esta labor, en la que se busque como objetivo que estos alumnos sean capaces de poder llegar a tomar sus propias decisiones y formen parte del grupo de la sociedad, para que puedan mejorar su calidad de vida. Y para ello, es muy importante implicar también a las familias, para que formen parte de la educación de sus hijos.

En segundo lugar, en mi centro de trabajo sí que hemos realizado alguna experiencia integradora con alumnos con alguna discapacidad. Le llamamos "programa de ayuda entre iguales", donde lo primero que se hace es formar a los propios compañeros de clase. Esta formación consiste en explicarles que tienen un compañero con dificultades y en qué consisten. Una vez se les da una pequeña formación, se inicia el programa que trata de que sean los compañeros los que le ayuden tanto en el aula como en los patios a relacionarse con los compañeros.... De esta forma se crea un vínculo entre toda la clase, a parte de ser una experiencia muy enriquecedora para todas las partes. Este programa se puede realizar tanto para actividades de clase como para patios.

2.3 Familias: contrato

A continuación,  voy a presentaros el modelo de contrato para trabajar tanto con la familia como con el resto de los compañeros para tratar de erradicar las conductas del alumno mencionado en las actividades anteriores.

ESTRATEGIA

1. Una vez observadas las conductas disruptivas del alumno, podemos ver como hay una serie de comportamientos que le cuestan mucho controlar, como es el obedecer a las indicaciones que le da el profesor cuando son contrarias a lo que el alumno piensa, con lo cual, en ese momento el alumno provoca disrupción en el aula. Por otra parte, el alumno presenta conductas desafiantes ante éstas situaciones llegando al punto de la agresión verbal tanto con el profesorado como con el resto de sus compañeros. Esto provoca que en muchas ocasiones el clima del aula no sea el adecuado para poder trabajar y provoque que el resto de compañeros se sientan molestos.
Llegados a este punto, se ha hablado con el alumno y con la familia a través de una entrevista, donde se han expuesto todos los motivos de conflicto que se están produciendo, llegando a la conclusión de intentar trabajar con el alumno mediante un contrato, por medio el cual, el alumno se comprometa a mejorar todos aquellos aspectos conductuales que alteran el orden de la clase. Empezaremos siempre por objetivos sencillos que se puedan ir cumpliendo para que el alumno se sienta reforzado.

Por otro lado, también se trabaja a través de la tutoría con el resto de la clase, para que se den cuenta de que éste alumno tiene unas cualidades especiales, dichas las cuáles son la causa de su comportamiento. Para implicarlos en el programa, y que puedan colaborar a la hora de mejorar las conductas del alumno en cuestión, llevarán un registro a la hora del patio donde anotarán las conductas negativas del alumno, y tendrá que estar firmado por las partes implicadas. Estos registros serán recogidos semanalmente para poder ver la evolución del alumno.

2. Recompensas. En la elaboración del contrato se ha pactado una serie de recompensas. Como es un alumno al que le encantan los dibujos,mandalas....y pintarlos, se le dice que si cumple con el contrato, se irá incrementando el tiempo  libre para realizar estas actividades.

En este momento, el tutor convoca a la familia para explicarle los acuerdos convenidos y cuáles son la medidas adoptadas con el alumno. Es importante contar con la colaboración de la familia, por eso se les convoca y se les pide la mayor colaboración posible.
Si todo el mundo está de acuerdo, se firman el contrato.

Pincha aquí para visualizar el contrato.

Contrato

Pincha aquí para visualizar el registro.

registro

Pincha aquí para visualizar seguimiento

seguimiento

Como valoración se puede decir, que aunque sea muy temprano, hay una implicación de los compañeros de aula para registrar las conductas que se producen en los patios, lo cual nos permite ver el número de incidencias que se producen. Esto es positivo porque a parte de involucrarse los compañeros, también le ayudan a controlar más los impulsos que le llevan a actuar de determinada manera. En cuanto al registro de control de aula, el alumno está viendo cuáles son sus comportamientos en clase, tanto los positivos como los negativos, y eso está haciendo que se esfuerce más para conseguir las recompensas.

2.2 Conductas positivas.

Relacionando el caso anteriormente mencionado en la actividad de análisis de conducta, he seleccionado tres de los comportamientos que queremos trabajar para que ayude a un mejor funcionamiento y clima de clase.

Los tres comportamientos que vamos a trabajar son los siguientes:

- Respeto al profesor y a los compañeros.

- No decir insultos y amenazas.

- Realizar las actividades cuando el profesor lo indique.

Para ello hemos elaborado una tabla en la que diariamente anotamos con pegatinas de colores si está cumpliendo con los objetivos que nos hemos marcado. A continuación se puede observar la tabla.

Alumno:	LUNES	MARTES	MIÉRCOLES	JUEVES	VIERNES
Respeto al profesor y a los compañeros.
No decir insultos y amenazas.
Realizar las actividades cuando el profesor lo indique.

El uso de las pegatinas de colores es debido a que visualmente es más fácil tanto para el profesor como para el alumno ver la evolución de la semana, y de esa forma poder alcanzar los objetivos o no en forma de recompensas. Las recompensas van variando, y siempre son escogidas en consenso con el alumno.

2.1 Análisis de conducta.

El análisis de conducta que voy a describir,  es el de un alumno de nueva incorporación en el colegio. Se trata de un alumno que presenta conductas disruptivas en el aula, a modo de insultos, faltas de respeto... tanto al profesorado como con el resto de los alumnos, lo cual provoca en muchas ocasiones, conflictos con los compañeros, o que el clima del aula no sea el adecuado.

Esta conducta, se ha ido manifestando más a lo largo del presente curso, creciendo paulatinamente. Al inicio del curso, prácticamente no se percibían rasgos , mientras que durante el curso, el alumno ha ido ganando confianza con los compañeros y profesores, y es cuando se han ido produciendo los episodios anteriormente comentados, hasta el punto de ser casi a diario, el registro de este tipo de conductas.

Dicho alumno, está frecuentemente revisado por médicos, ya que toma medicación, y de la ingesta de ésta, depende mucho su comportamiento (con dosis más elevadas el alumno se encuentra más calmado). En principio, no aparenta que tenga ninguna otra sintomatología que provoque dichos comportamientos.

Estas conductas mencionadas anteriormente, suelen materializarse en agresiones verbales principalmente. Cuando el alumno se ve contrariado, tiende a no prestar atención a las indicaciones que se le dan, a negarse a realizar las actividades  o bien agredir verbalmente. De momento no ha presentado ningún episodio de violencia física. Lo que queda de manifiesto, es que dichas conductas tienen la finalidad de conseguir lo que el quiere o evitar realizar algunas actividades, y no como una forma de comunicación.

Dichos comportamientos, quedan registrados en una hojas llamadas "registros de incidencia", donde se ha podido comprobar el incremento de dichos registros por el aumento de las conductas disruptivas del alumno. Cuando el alumno se encuentra en el aula ordinaria, esto produce que se le tenga que aplicar técnicas como la de tiempo fuera, para que se pueda calmar y recapacitar sobre lo sucedido, pero resulta complicado.

Fruto de estos cambios de conducta, hemos realizado un trabajo con el alumno para tratar de modificar las conductas y que trate de saber canalizar los enfados cuando estos suceden. Para ello elaboramos una tabla de pictogramas con velcros, donde quedan reflejados tanto comportamientos positivos como disruptivos. al alumno se le presentan diferentes situaciones, y el alumno tiene que colocar la conducta en la columna correcta, y tratar de explicar el por qué de dicha elección.

 A continuación muestro la tabla de pictogramas con los diferentes comportamientos, tanto positivos como negativos.

Mediante esta tabla, hemos trabajado su conducta, logrando disminuir el número de registros  de incidencia del alumno.